Tiger Woods, en su hoyo más profundo tras su última detención

Tiger Woods la vuelve a liar. Hace ya unos días desde que salió a la luz la noticia de que la estrella del golf había sido arrestado por conducir supuestamente bajo los efectos del alcohol. Según fuentes policiales, habría sido detenido muy cerca de su casa, en la Isla de Jupiter, donde posee una exclusiva mansión. La detención habría ocurrido a las tres de la mañana, y mas tarde sería trasladado a la comisaría del municipio de Palm Beach, de donde salió sobre las 10.30 de la mañana en libertad sin fianza. El deportista no tardó en lanzar un comunicado en el que decía que la intoxicación se debía a “una reacción inesperada de medicamentos con preinscripción”.

¡Claaaaaaaaaaaaaaaaro que sí…!

También aprovechó el comunicado para pedir disculpas a su familia, amigos y fans, y les prometía que «haré todo lo posible para que no vuelva a ocurrir». Y es que esta detención se suma a una larga lista de capítulos oscuros dentro de su vida que supone un nuevo golpe a su imagen personal del que le va a costar levantarse. En las últimas horas la policía ha difundido un vídeo en el que se puede ver al deportista muy afectado, balbuceando y con serios problemas para mantenerse en pie.

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Según confirmaron las fuentes policiales, la prueba de alcoholemia resultó negativa, por lo que la intoxicación se debía a una mezcla de medicamentos analgésicos con receta, una droga cada vez más común en EEUU, ya que en 2015 murieron más de 20.000 personas por sobredosis de medicamentos. Justificar que no había bebido aludiendo a las pastillas no mejora mucho la situación de Woods, la verdad.

«Haré todo lo posible para que no vuelva a ocurrir»

Tiger no pasa por su mejor momento…

En la imagen del archivo policial se ve a un Tiger Woods de capa caída, ojeroso, con rostro serio y cansado, una imagen totalmente distinta de la que se espera de un deportista su nivel. De hecho, según hemos podido saber, se encuentra en la última fase de recuperación de su operación de espalda a la que se sometió en abril, y en su círculo cercano se atrevía a afirmar que no se sentía “tan bien” desde hace años, y visto lo visto, parece que el bueno de Tiger se lo pasa muy bien entre ejercicio y ejercicio…