El «problema Young Thug» en los Grammys
Desde siempre, y especialmente desde que las redes sociales le han dado voz a todo el mundo -haciendo que se ha exagere todo-, ha habido polémica en los Premios Grammy.
Todo, desde las actuaciones de la ceremonia, a los looks, las parejas y por supuesto, nominados y premiados, es susceptible de acabar siendo portada de revistas y periódicos o trending topic.
Casos sonados como el de la derrota de Kendrick Lamar con su ‘good kid m.A.A.d city’ a manos de Macklemore (¿dónde estará ahora?) y algo de racismo en la organización… Algo que, según Adele, también habría influido en no premiar a Beyoncé en 2017 por ‘Lemonade’ o 50 Cent interrumpiendo a Evanesence cuando fueron a recoger su premio de Mejor Artista Novel en 2004.
Y es que a pesar de tener la fama y la fortuna que muchos querríamos, a los artistas también les pica el no llevarse galardones a casa, y los Grammy son los premios más prestigiosos en el mundillo musical americano.
Los Grammys y la polémica de las nominaciones
Los Grammys son esos premios anuales que otorga la Academia Nacional de las Artes y las Ciencias de la Grabación de Estados Unidos desde 1959. Hay unas 80 categorías, aunque no todas se emiten en la gala con público, y resultan un esfuerzo admirable por premiar como se merece un negocio que mueve millones de dólares en todo el mundo y que hace a mucha gente muy, muy rica.
Sin embargo algunas de las voces más respetadas de la industria musical no suelen estar de acuerdo con la dinámica de nominados y premiados y la polémica hace hervir los premios Grammy año sí año también. Y por suerte o por desgracia no todo fue achacable al racismo.
Los premios Grammy tienen un proceso de nominación largo y complicado:
1- Las compañías discográficas o los artistas independientes presentan candidatos a las categorías.
2- Se revisan los trabajos por más de 100 expertos de la industria discográfica, para ver si son nominables o no.
3- La lista de seleccionados pasa de nuevo a los miembros de la Academia Nacional de las Artes y las Ciencias de la Grabación y de ahí se seleccionan los nominados.
4- De ahí se vuelven a enviar y los miembros votan entre los 5 (habitualmente) finalistas. El ganador es el que recoge el premio Grammy.
Acordes y desacuerdos
Pero parece que los miembros de la Academia se mueven siempre en base a unos criterios -digámoslo así- no estrictamente musicales, y los propios artistas premiados lo denuncian habitualmente, tal y como hemos visto en el caso de Adele y Beyoncé.
Cuando los académicos seleccionan y votan, luego son los artistas los que quedan expuestos con sus decisiones. Así, en el caso que mencionábamos de Kendrick y Macklemore, el de ‘Thrift Shop’ pidió perdón y dijo que Kendrick hubiera sido el justo ganador. Tal fue el bochorno, que Kendrick ha arrasado desde entonces con sus otros dos álbumes en los Grammy.
En el caso de Adele y Beyoncé sucedió lo mismo, y muchos en el mundo de la música lo comentan en redes sociales. Las grandes reivindicaciones y la polémica también se dan antes y después de la gala de los Premios Grammy.
El «problema Young Thug»
En este caso se repite la dinámica de años previos en lo que podemos llamar el «problema Young Thug». El de Atlanta es una referencia para todos los artistas de la escena, todos quieren colaborar con él (desde Drake a Nicki Minaj) y lo mismo hace un disco con guitarras, que un EP de seis canciones que un disco conjunto con Future, y en todos los casos lo borda. Pues los Grammys solo han considerado darle un premio por hacer los ad-libs en ‘This is America’, el tema de Chilidsh Gambino.
Algo parecido pasa con Future. Todos los lectores de The Medizine sabéis que Future es uno de los nº 1, y que lo lleva siendo durante más de un lustro. Ha reventado todos los récords de los charts y el único Grammy que ha ganado ha sido este año por participar en «King’s Dead», y su única nominación hasta la fecha era por participar en ‘Views’, el disco de Drake.
Es una polémica en los Premios Grammy que desprestigia unos galardones que parecen no estar en conexión con la realidad musical. Si se siguen premiando trabajos por compromisos políticos light o rechazando música más difícil, podrían acabarán perdiendo todo su prestigio.
¡Nosotros sí somos justos eligiendo a nuestros ganadores! ¿Has participado ya en nuestro nuevo sorteo? ¿A qué esperas?