“No, a mí es que no me gusta el rap”: una reflexión

Vaya, ¡qué interesante! Cuántas veces habré oído esa frase del titular, y no de labios de mi madre. El caso es que siempre que me dicen eso, no puedo evitar pensar que no puede ser cierto, que no puede no gustarte el rap.

Bueno, pido perdón, hay gente a la que no le gusta la música, y es una opinión de verdad totalmente respetable. Este artículo es para aquellos a los que les mola la música pero creen que el hip hop no.

Si nos ponemos a acotar, también hay que decir que, si te mola la música negra, te va a molar el rap. Es lo que hay, todos los rappers maman del funk, el soul, el jazz, el RnB. Y hoy en día es casi imposible encontrar un artista de los géneros anteriores que no haya metido mano en el rap o viceversa.

En un mundo ideal, la música nace del corazón de los artistas, no tiene barreras y nos queremos como hermanos. Lo cierto es que la realidad se parece muchísimo a la utopía, y la fusión de estilos está a la orden del día, y en cualquier género musical. El rap es tan vasto que algo te tiene que molar. Si no te gusta el rap, te gustará más algún otro estilo de música, y seguramente haya algún artista que fusione o haya fusionado el rap con lo que te mole.

Normalmente quien dice que no le gusta algo es porque no lo conoce, y la intención de este artículo (y otros más) es descubrir algo que te llame la atención, y que sirva como un hilo del que tirar para descubrir nueva música que igual Spotify no te recomienda.

Por ahí van los tiros. La gente se piensa que el rap es Coolio en ‘Gangstas Paradise’ . OK, es uno de los mayores temazos, pero es de hace 25 años. Lo mismo con ‘Juicy’ o ‘Shook Ones Part II’ . Los temas más míticos son del rap del ghetto, algo muy de pureta y que le gusta (mucho) a la gente a la que le gusta el rap, especialmente aquellos que dicen que les gusta el «rap real».

Podríamos pensar que el tiempo ha pasado y ahora el rap es distinto, ya no solo es una música marginal del ghetto, sino que tiene mil caras. El hip hop siempre ha estado en contacto con otros géneros y muchas culturas, lo que naturalmente deriva en fusiones de estilos a tutiplén.

Los orígenes comunes junto al electro, la influencia de George Clinton en el G-funk, Rick Rubin con su sello Def Jam y sus grupos alternativos como los Beastie Boys o los Red Hot Chilli Peppers, el grime británico como fusión de rap y electrónica, el jazz de Erik Truffaz, o, cómo no, el reggaetón son unos pequeños ejemplos de ello.

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La música es música, y aunque muchos digan que la suya es para los chicos del ghetto que no tienen salidas en la vida, no significa que no se pueda disfrutar si no eres uno, ni que por escucharlo te vaya a arruinar la vida o meter en la cárcel.

Tampoco significa que si te mola el hip hop tengas que convertirte en un delincuente. De hecho, esta desviación es muy triste y es lo que define que alguien sea o no “real”. Por favor, que a nadie se le ocurra seguir la senda de ser quien no es, especialmente de esa manera.

Hay raperos desde lo más chungo hasta lo más blandito, sea en castellano, en inglés o en swahili. Los hay chungos que hablan de lo chungo, chungos que hablan de lo blandito, y un amplio espectro en medio. El vídeo de ‘Rascal’ de RMR asustará mínimo al 80% de los que lo vean, y no por ello les veta la visita.

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La gran mayoría de músicos de todo tipo admiran a algún rapero, y viceversa, a tu rapper favorito no solo le gustan Tupac y Snoop Dogg, sino que también escuchan de todo (volvemos a RMR).

La popularidad que alcanzó el hip hop en EEUU desde los 90s convirtió al género en un referente mundial, quizá menos popular en España, pero suficiente como para entrar en los oídos de quien escuchara algo más allá de lo habitual.

No queremos decir que si tu guitarrista favorito se tira de un puente tú lo hagas también, pero sí que hay que fiarse de quien tiene conocimiento en algo, principalmente si se les admira, y sobre todo si son los que hacen la música que nos mola.

De hecho, no es solo tu guitarrista favorito. Celebridades fuera del mundo de la música, de la talla de Will Smith u Obama son reconocidos fans del género. Bueno, Will Smith tuvo un dúo de rap , y todos sabemos continuar un «al oeste en Filadelfia crecía y vivía…».

Si tenemos en cuenta que el reggaetón es también hip hop, y que ‘Contando Lunares’ fue la canción más reproducida en streaming del año pasado en España, algún tema de rap te mola y lo has bailado (sí, el rap se puede bailar ). Ya no hay excusa.

Además de eso, seguro que algo de carne de gallina se te habrá puesto cuando en alguna peli han puesto un buen temazo en un momento específico, como el “Can’t Tell Me Nothing” de Kanye West en”Resacón en Las Vegas” , o las tres cuartas partes de la banda sonora de “A Todo Gas”. Bueno, no son precisamente pelis de culto, para eso están “Amores perros” o “Barrio” .

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En EEUU ya es el estilo más popular, y en Reino Unido va de camino. Con la influencia que ambos países ejercen en la cultura occidental, es cuestión de tiempo que el rap suene de manera constante en las radios de todo el mundo.

Lo cierto es que ya está ocurriendo, pero a un ritmo lento, como acabamos de ver hace poco. El oído no es fácil de acostumbrar, y los prejuicios que se tienen para según qué estilos no ayudan.

Sin embargo, en The Medizine estamos para cambiar eso, queremos demostrar que el rap es más que lo que ves en las pelis, que toca mil palos, y que seguro que hay un tipo de rap que te guste y del que puedas disfrutar, seas quien seas.

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