Meek Mill denuncia las injusticias de su caso en ‘The New York Times’

En 2017 Meek Mill ingresó a prisión de manera injusta: se demostró que uno de los policías que llevaban su caso era un corrupto, lo que puso a trabajar a los abogados del rapero hasta que en abril de este año consiguieron su puesta en libertad. Ahora, meses después de su salida, el de Philadelphia ha escrito un artículo de opinión para el New York Times en el que cuenta su experiencia y denuncia las injusticias que sufrió.

El autor de ‘Wins & Losses’ comienza el artículo contando la situación por la cual entró a la cárcel. Según narra, toda la problemática viene por un caballito realizado con una moto en Manhattan. Un tribunal de Nueva York desestimó el cargo, pero no pasó lo mismo con el juez de Philly. El letrado de la ciudad natal de Mill consideró que aquella interacción con la policía era una violación de la condicional, derivada de una condena de 2007, y Meek acabó entre rejas porque dicho juez lo consideró un «peligro para la comunidad» y alegó «riesgo de fuga».

Por un ‘Wheelie’ en Manhattan, acabó en en la cárcel de Philadelphia

Tras explicar todo aquello, Meek comienza la denuncia. El rapero se queja de que el sistema judicial estadounidense trata de forma diferente a la gente negra, fomentando un sistema en el que niños que han crecido con sus padres en prisión se vuelven más propensos a acabar como ellos. Pide que se responsabilice a los legisladores que apoyan este tipo de políticas, que provoca que los negros y latinos de zonas desfavorables puedan acaban en prisión más fácilmente. Por otro lado, no se queda de brazos cruzados y pretende luchar contra estas injusticias:

La realidad es que los afroamericanos y los latinos que provienen de vecindarios afectados por la pobreza tienen asignados defensores públicos demasiado sobrecargados para hacer algo en la mayoría de los casos que no sea negociar el acuerdo de culpabilidad más favorable, independientemente de la culpabilidad o la inocencia.

Pero eso no es todo, el de ‘Dreamchasers’ no se conforma con un cambio en las leyes para que el sistema sea un poco más justo, quiere una mejora de los programas de rehabilitación, políticas de condicional actualizadas, un sistema de fianzas mejorado, etc. Según él, si los estadounidenses se quitasen estos encarcelamientos en masa, podrían utilizar ese dinero para planes de empleo y reintegración que ayudasen a esos presos a reinsertarse en la sociedad y que ayudarían a que no volviesen a prisión.

Parece que el bueno de Meek Mill tuvo una mala experiencia entre rejas y no quiere que nadie pase por lo mismo, sino no tendría sentido tanto movimiento. Sin duda es algo que le honra, esperemos que consiga su objetivo.

No es el único problema que ha tenido el rapero de Philadelphia en los últimos días. Le piden 6 millones de dólares por retirar una demanda.