¿Por qué el «Episodio V» es el mejor de «Star Wars»?

Cuando George Lucas estrenó «Star Wars» (luego conocido como episodio IV) en 1977, todo era nos pareció más y mejor, incluido para los que la vimos por primera vez muchos años después debido a nuestra fecha de nacimiento.

La sensación real de aventura, de exploración, la frescura y complejidad de los personajes, la música, la elección de actores, los decorados, la profundidad de la fuerza, los efectos de sonido y especiales. Absolutamente todo nos dejó fascinados e hipnotizados en esta primera entrega de lo que acabaría siendo la saga más popular de la historia del cine, con permiso de Marvel.

Y viendo el éxito que tuvo la película, estaba claro que él mismo quería continuar la historia y la Fox aun más. Pero Lucas estaba tan agotado (el rodaje le había costado un infarto y un divorcio) que aun teniéndola escrita eligió a otro director para que se encargara de ella. Y el nombre propio que saltó a la palestra no fue otro que el del experimentado (aunque no en este tipo de bombazos de taquilla) Irvin Keschner.

Lucas sabía perfectamente lo que había ofrecido en la primera entrega, con lo que tenía claro que debía ir más allá, hacer una segunda cinta más oscura, más profunda, con mas espíritu (si cabe) de aventuras y que no tuviese un final tan positivo. Y eso hizo, el más y mejor de Lucas se llamó «El imperio contraataca», título premonitorio sabiendo el final de la cinta.

Tras un (impresionante) ataque en las bases rebeldes de Hoth, Luke Skywalker y R2D2 deberán ir en busca del misterioso planeta Dagobah en busca del maestro Yoda, y así convencerlo de que lo entrene en los secretos de la fuerza.

Mientras sus compañeros (Solo, Leia, Chewbacca y C3P0) deberán pedir asilo a Lando Calrissian un tipo tan poco fiable como imprevisible.

Una historia que resumida parece sencilla y que en la práctica gracias al buen hacer de Lucas, Keschner, Williams y el resto de profesionales rápidamente se convirtió en una experiencia cinematográfica sublime. Subiendo todos los estándares del cine espectáculo que busca generar dividendos pero también del de máxima calidad.

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Es por ello que el episodio V suele ser el favorito de la mayoría de fans (o simplemente simpatizantes) de la saga galáctica más popular de la historia, que nos perdonen por tal afirmación los seguidores de Star Trek. Y puede que la película más redonda de todas, por supuesto superando a las precuelas y a las entregas ya dentro de Disney.

Pero como todo en la vida, esta opinión es subjetiva y cada uno tiene la suya. Los valores con que se juzgan una obra cinematográfica se supone que son neutrales, pero no así las personas que los definen, entonces ¿Quien tiene razón? Todos y nadie.